Bellísima, delicadamente sensible e inteligente película que despliega la trama de una forma que va hechizando casi imperceptiblemente hasta que uno se siente parte de ella y un trozo de nosotros se queda también en África
No es posible olvidar una película así. Una música que subyuga,
transporta y evoca. Un amor que nos conmueve y nos duele, que casi podemos
sentirlo como lo sienten ellos...hermoso como un cuento bien contado,
inalcanzable como toda la belleza de África. Cómo olvidar una fotografía tan
evocadora.
Las primeras impresiones de fascinación que sentí por
esta película perviven todavía en mi memoria y si me dejo llevar, casi logro
sentir la misma emoción de hace tiempo, un paraíso donde apenas ha llegado la
civilización.
Esta es la película de la que me enamoré, y
como en todos los amores he tenido momentos mejores y peores, pero por ahora no
me llegó el desamor. Así que cualquier cosa que diga, puede ser visto como puro
acto de pasión. Primero, debería decir que la considero una obra maestra del
arte cinematográfico. Ahora debo definir arte, y para mi, es la expresión
humana, que usando lo físico para impresionar nuestros sentidos, es capaz de
transmitirnos de una forma indeleble algún sentimiento o emoción proyectado por
su autor/a.
En Definitiva, quién no
viviría?????:
Paisajes de Kenia
ideales. Un fondo enormemente cuidado y una mujer que abandonó su
acomodada vida, para buscar su propia fortuna superando fronteras, prejuicios y
distancias, sus habitantes y los problemas de la colonización,...emoción y
respeto al país y sus gentes a los que defendió el resto de su vida y que la
llamaban "hermana leona", por la fortaleza y determinación ante la
adversidad.
Un hermosísimo canto a África, a la naturaleza y al arte
de contar una historia tocando los resortes más básicos de los sentimientos
humanos, amor, pasión, enfermedad, muerte, soledad, marginación, ruina,
desamor... Mágicamente al final sólo queda el encanto de un viaje memorable
marcado por dos vuelos en avioneta.
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